SOMOS LO QUE COMEMOS
No somos lo que comemos
sino lo que asimilamos.
No nos nutrimos de lo que entra por la boca
sino de lo que finalmente llega a la célula.
Las personas nos convertimos
en lo que olemos,
en lo que vemos,
en lo que oímos
y en lo que comemos.
Nos convertimos en lo que sentimos emocionalmente,
en lo que pensamos
y en lo que profundamente deseamos.
Generamos lo que a nivel inconsciente
necesitamos para aprender y evolucionar.
Nos transformamos en lo que integramos energéticamente.